Qué hay de verdadero o falso en algunas de las creencias más populares sobre la formación online
Probablemente habrás escuchado todo tipo de ideas, creencias o mitos de la formación online. Aquí es donde muchos se hacen la gran pregunta: ¿son todas ellas ciertas? Pero para poder responder a esta cuestión antes debemos encontrar la respuesta a otra interrogación: ¿en qué consiste la formación online?
A pesar de no ser algo novedoso, lo cierto es que las nuevas tecnologías, junto a la aceleración provocada por la pandemia, han revolucionado la forma y los hábitos de comunicación en muchos ámbitos, entre ellos el laboral y educativo. En este contexto, también se han desarrollado nuevas oportunidades para adquirir nuevos conocimientos y aprendizajes a través de Internet, en una nueva modalidad que se adapta a todas las metodologías y donde no es necesaria la presencia física entre profesor y alumno.
Sin embargo, hay ciertas ideas erróneas que persisten cuando se habla de los mitos de la formación online. En este artículo vamos a hacer un repaso de algunas de las creencias más comunes, pero no por ello más ciertas.
1. La formación online es de menor calidad
Contrariamente a lo que muchos piensan, la calidad educativa o formativa no depende del formato en el que se presenta, sino en el contenido y la metodología que se emplea. Este tipo de formación, además, permite utilizar una serie de recursos que contribuirán a que una clase o asignatura resulten más interactivas.
2. Hay que ser experto en tecnología
El uso de herramientas digitales y plataformas caracteriza la educación a distancia, pero esto no debe interpretarse como un obstáculo para acceder a ella, sino más bien todo lo contrario. En weeras apostamos por la tecnología y creemos firmemente en que ésta no es un obstáculo, sino un facilitador. Es intuitiva y amigable para poder acompañar a cualquier docente o estudiante en su proceso de aprendizaje.
3. Digitalizar los contenidos conlleva mucho trabajo
Las plataformas virtuales cuentan con herramientas que facilitan la labor de digitalizar los contenidos. En el caso de Weeras Author, puedes diseñar y publicar contenidos digitales e interactivos de forma sencilla y sin necesidad de instalaciones ni descargas.
4. El contenido se vuelve poco dinámico y aburrido
Aprender online puede ser tan divertido o aburrido como estar en un aula. Todo dependerá de la forma en la que se presente el contenido y el esfuerzo que se dedique en crear interacciones y motivar al alumnado. Para ello, existen múltiples herramientas integradas en las plataformas virtuales que permiten gamificar y dinamizar los contenidos para crear actividades y libros digitales interactivos.
5. No se puede controlar el aprendizaje del alumno
Una de las ventajas de los entornos virtuales es que ofrecen variedad herramientas para medir el aprendizaje del alumno, así como informes y estadísticas que permiten controlar el progreso de los estudiantes, ya sea de forma grupal o individual.
Además, con weeras puedes trabajar el aprendizaje por proyectos: mediante fases, plazos y estrategias de evaluación puedes hacer un seguimiento del aprendizaje del alumno.
6. No existe una planificación pautada
Si bien los estudiantes cuentan con la flexibilidad para decidir en qué momento del día adelantan su aprendizaje o desarrollan las tareas asignadas, siempre existirá un calendario que regirá el desarrollo de un curso. En este sentido, las plataformas virtuales desempeñan un rol esencial, puesto que permiten programar las diferentes actividades.
Ya hemos desmentido algunos de los mitos de la formación online más comunes y hemos descubierto que la realidad es bien distinta. ¿Conoces alguno más?